Page 124

SEMANA_EJE_CAFETERO

Aquellos tiempos Esta presentadora de televisión salió de Armenia hace 15 años en busca de otras oportunidades. Así recuerda aquella ciudad, tan distinta de la nueva. Catalina Gómez Sánchez Presentadora de Noticias Caracol. nos mantiene vivos, o al menos no nos deja olvidar quiénes somos y de dónde venimos. Pero mirar hacia adelante es el reto, y es lo que Armenia me enseñó. Tenía 17 años 124 Volver significa para mí revivir aquello que pasaba en cada esquina. Cómo olvidar las fiestas en el Club América, a las que los jóvenes llegábamos sin falta; son imborrables las noches eternas en el rumbeadero Altamira, de donde solo salíamos huyendo de la Policía porque éramos menores de edad, aunque con ínfulas de adultos; divertidas fueron las veces en que al salir del colegio parábamos un bus urbano y le rogábamos al conductor que nos llevara a tres por 1.000 pesos; las fiestas de Salento también están grabadas en mi memoria, entre tantas bellas imágenes de aquellos tiempos. Armenia ha cambiado radicalmente desde que me fui en 2002. Para muchos, el cambio comenzó después del terremoto de 1999, aquel golpe emocional que nos marcó a todos los que lo vivimos, pero que también fue un impulso para salir adelante con el empuje que nos caracteriza. Hoy veo lo que hace diez años tanto añoramos: centros comerciales, grandes cadenas de supermercado, almacenes, restaurantes, miles de visitantes que le dan a Armenia un lugar destacado en el turismo nacional. Volver es sentir el olor del café matutino; recordar los paseos a la finca de mi tío Mario con mi papá y la familia; disfrutar de mi mamá y mis tías, que siempre me consienten como si todavía fuera una niña, la misma que se quedó en la mente y el corazón de quienes me conocieron como la hija de Estella y Óscar, la que estudió en Bethlemitas y nunca izó bandera, la que caminaba por la 14 sin ningún temor. Regresé hace poco como periodista, y en la Plaza de Bolívar me sorprendí con el reconocimiento de la gente, la que no me olvida, la que me vio crecer y que comparte mis triunfos, que también, seguro, son de ellos. Es cierto: todo tiempo pasado fue mejor. La nostalgia cuando salí de mi casa a hacer mis estudios univer-sitarios. Armenia me dejó los me-jores recuerdos de mi familia y del colegio (aunque no creo que las monjas tengan el mejor recuerdo de mí). *Hay otra Catalina, que también escribió sobre sus recuerdos en el Quindío, regresen a la PÁG. 47 FOTO: DANIEL JARAMILLO


SEMANA_EJE_CAFETERO
To see the actual publication please follow the link above