TERPEL - El negocio de servir

Hace cinco años, cuando avanzaba en la unificación de las compañías regionales de distribución de combustibles, los accionistas de Terpel definieron el propósito de la nueva empresa en una máxima: "Las personas son el centro de nuestras decisiones".

Desde entonces, esta sencilla pero profunda frase marca el modo de actuar de la Organización Terpel a todo nivel y en sus relaciones con sus grupos de interés. Esta sentencia define su política corporativa y comercial para ser una compañía que "atiende personas, no carros" y se relaciona como un Aliado País con las comunidades donde opera, sus afiliados, proveedores y empleados.

"Trabajamos día a día para ser la inversión más segura de nuestros accionistas, el mejor aliado de nuestros clientes, el mejor cliente de nuestros proveedores, el mejor lugar para trabajar y el mejor vecino de nuestras comunidades, para consolidarnos como la marca más querida por los colombianos", afirma Sylvia Escovar, presidenta de la compañía. Agrega que Terpel llega a todas las regiones de Colombia y genera progreso desde La Guajira hasta el Amazonas.


Este compromiso con el país quedó en evidencia en la medición realizada por Pyxis, que arrojó como uno de sus aspectos más destacados el modelo de sostenibilidad y gestión con sus grupos de interés. Algunas cifras también lo confirman.

La compañía cuenta hoy con 1.900 estaciones de servicio (EDS) entre propias y afiliadas, la red más grande del país, lo cual le permite llegar a todos los rincones de Colombia y literalmente movilizar los territorios en donde opera. A partir del concepto "atendemos personas, no carros", ha implementado una estrategia consistente en ofrecer el mejor servicio, el precio más competitivo y estaciones más amplias e iluminadas, dotadas de baños limpios y disponibles, con servicios complementarios que hacen de tanquear una buena experiencia. Este año terminaron la renovación y cambio de imagen de alrededor de 1.241 EDS (el 60 por ciento de la red). También terminaron de incorporar nuevos formatos como 40 tiendas Altoque, 5 quioscos Deuna y 14 autolavados Ziclos, lo cual ha permitido aumentar los estándares de una industria tan tradicional y comoditizada.


La innovación también ha incluido un servicio especializado para motociclistas y el lanzamiento del Club Terpel Lifemiles que entrega millas por consumo de combustible y productos de las tiendas de conveniencia. En 2017 pusieron en servicio 20 nuevas islas para motos, llegando así a 39 en todo el país, y con la tarjeta alcanzaron 240.000 miembros.


También tiene entre sus mayores prioridades el compromiso con la protección del medioambiente y el cuidado de los entornos donde opera, pues busca que sus combustibles y lubricantes sean ambientalmente amigables, promueve el consumo responsable y la adopción de paneles solares en plantas y EDS. La compañía también impulsa y promueve el gas natural vehicular como un combustible transitorio mientras el país avanza hacia la movilidad eléctrica. En materia social, tiene su punta de lanza en la Fundación Terpel, que trabaja desde hace más de una década por la calidad de la educación del país. En 2017 favoreció a más de 334.000 personas y 302 instituciones, por lo cual este año podría alcanzar el millón de niños beneficiados desde su creación en 2004.

Asimismo, participa activamente en los temas de reconciliación, pues como afirma la presidenta de la compañía "construir la paz es una tarea de todos". De hecho, Terpel apoyó la puesta en marcha de las 26 zonas de reincorporación, al aportar el combustible que moviliza estas regiones, y hoy está involucrada con el impulso y desarrollo de proyectos productivos en zonas como Caquetá. De la misma manera, a través de su programa Restaurando Sueños brinda oportunidades laborales a personas en proceso de reintegración y lidera espacios de voluntariado enfocados en resolución de conflictos y perdón.

Para desarrollar estas tareas, genera más de 1.300 empleos directos y 7.000 indirectos. Las políticas de bienestar y desarrollo de los colaboradores promueven un equilibrio entre la vida familiar y laboral. Por su parte, cubre el 60 por ciento de las vacantes internas con empleados de la compañía y el 99,3 por ciento de la planta interna ha recibido algún tipo de formación.


Como el 90 por ciento de la red de EDS es propiedad de terceros que se afilian a la bandera, para ellos la empresa ha creado la Red de Empresarios Terpel (RET), con el objetivo de promover el trabajo en equipo, compartir mejores conocimientos técnicos y novedades de la industria, para crecer en conjunto.

Durante este año, el valor económico directo creado por la compañía ascendió a 15,3 billones de pesos, lo cual le permite consolidarse como una de las empresas privadas más grandes del país. Sin embargo, el grueso de este valor se distribuye en Colombia. Solo en pago de proveedores alcanza 13,8 billones de pesos y otra buena parte se va en salarios y beneficios sociales, pagos al gobierno, dividendos a los accionistas e inversiones en la comunidad. Sin duda, tiene ventas gigantescas, pero con márgenes muy pequeños.

La compañía privilegia al proveedor local y las compras nacionales, lo cual se refleja en que más del 97,6 por ciento de los proveedores son colombianos. De igual manera, la compañía busca formalizarlos y entrenarlos para desarrollar toda la cadena de valor, pues a lo largo de sus 50 años de historia, como afirma Escovar, Terpel se ha transformado para adaptarse a los nuevos contextos y así seguir cumpliendo con el propósito que le dio origen: servir a los colombianos.