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Ficmac - Una luz en el tratamiento del cáncer

Con las pruebas de este laboratorio colombiano, los oncólogos pueden tratar de forma más efectiva y confiable a cada paciente. Así, han logrado que quienes padecen esta enfermedad vivan más, y ahorrarle costos al sistema de salud.

Hace diez años, los oncólogos Jorge Miguel Otero, Carlos Vargas, Andrés Cardona y Hernán Carranza, instauraron la Fundación para la Investigación Clínica y Molecular Aplicada del Cáncer (Ficmac). El propósito era analizar muestras de tumores que les permitieran a los oncólogos del país conocer más a ese enemigo que tenían al frente y seleccionar la terapia más efectiva para atacarlo.

Lo hicieron como una respuesta a la evolución de la oncología y ante la ausencia de laboratorios nacionales de este tipo. Antes de eso, los médicos especializados en esta área de la medicina ofrecían a sus pacientes las mismas quimioterapias para tratar casi todo tipo de tumores.

Pero los avances en la ciencia permitieron entender más la fisiología del cáncer por esa época y comprender que la atención debía ser de forma personalizada. No todos los tipos de cáncer eran iguales y no todas las personas reaccionaban de la misma forma a un tratamiento.

La diferencia entre lo que había hace diez años y hoy es abismal. Para el doctor Carranza es equivalente a manejar de noche un carro con o sin luces. La ventaja de hacerlo con estas luces es que el paciente recibe el tratamiento preciso y a la medida, con lo cual se logra mejorar su sobrevida.

Carranza, quien es el presidente de la compañía, asegura que “a manera de ejemplo, si la prueba arroja que el tumor expresa el gen ALK, ese paciente, en lugar de recibir quimioterapia endovenosa, que tendrá efectos secundarios como caída del pelo y náuseas, tomará una tableta diaria, lo que le permite movilizarse sin problemas y, además, sin efectos secundarios serios”.

A esto se suma que los resultados serán superiores a los de la quimioterapia en temas de sobrevida y disminución de la enfermedad. “Con Tumores ALK, la sobrevida es tres o cuatro veces más que con el tratamiento convencional, lo que se traduce en tres y hasta cuatro años más de vida, en promedio”, agrega Carranza.

El valor para la sociedad es enorme. Por un lado, es un paciente que se salva de una quimioterapia que no le va a hacer tanto efecto. Por otro lado, le aporta al sistema de salud, pues con este diagnóstico se le da tratamiento al que verdaderamente lo necesita. Hoy, Ficmac procesa 320 pruebas por mes para saber cómo tratarlos mejor.

Todo comienza con una biopsia del tumor. Luego, con aparatos tecnológicos de punta, efectúan evaluaciones genéticas de los genes más comunes en él. La prueba se llama Oncomine Focus y es un panel genético equivalente al realizado en Estados Unidos y Europa. Básicamente, evalúa mutaciones y presencia de mutaciones con los tratamientos que hay disponibles en Colombia para esa enfermedad.

Hernán Carranza

Vicepresidente de Ficmac

Foto: Juan Carlos Sierra

Entrega rápida

Un diferenciador de Ficmac frente a su competencia es que procura que ese resultado se entregue lo antes posible, ojalá en cuestión de 48 horas.

Los pacientes y sus oncólogos quieren empezar tratamiento cuanto antes porque con cada minuto que pasa el cáncer avanza, y mientras más rápido se comience a atacar, mejores serán los resultados.

Esa conciencia hace que estas muestras no tengan que esperar a que alguien las reclame, sino que exista un sistema de comunicación más rápido para agilizar el proceso. Actualmente, ofrecen las pruebas en melanoma, cáncer de colon, pulmón y ovarios, que son las patologías para las terapias aprobadas en el país, financiadas por la industria farmacéutica. “Por el Mipres del sistema de salud se podrían solicitar, pueden pasar seis semanas mientras se aprueba y eso es mucho tiempo”, dice Carranza.

También procesan pruebas de los genes BRCA, HER2 y PD-L1. Para interpretar los resultados, el grupo de expertos se reúne para analizar el caso y enviar cuanto antes una decisión al médico tratante.

Ellos no son los únicos en Colombia, pero al ser los primeros siempre han ido a la vanguardia. De hecho, 78 por ciento de los excedentes del año anterior fueron destinados a investigación mediante la adquisición de tecnología biomédica de última generación y única en Colombia.

La otra ventaja frente a otros laboratorios es que todos son oncólogos clínicos que ejercen. Están al tanto de las novedades científicas dadas a conocer en los congresos internacionales y saben cómo se desarrollan los tratamientos.

Carranza reconoce que el costo de la prueba es alto, pero, al mismo tiempo, es muy valiosa para definir el tratamiento. Para que el gasto en el sistema de salud no se desborde en Colombia, los medicamentos solo pueden suministrarse si el tumor expresa ese gen.

De esta forma, los médicos usan fármacos que se necesiten y en la persona que los requiera. Antes de eso, se aplicaba un remedio innovador, pero fallaba una y otra vez. Luego se identificó la mutación y se pudo saber cuáles eran esos pacientes a los que sí les servía.

Tener muestras de tumores les da, además, la oportunidad de hacer investigación del cáncer en el país. Así es como han podido confirmar que el cáncer de pulmón de los colombianos es más parecido al de los asiáticos que al de los europeos, lo que podría ayudar en el tratamiento, pues Colombia debería seguir más las prácticas clínicas de Japón en lugar de las de Europa.

Recientemente, la Academia Nacional de Medicina les otorgó el premio a la Investigación Científica 2019 por un estudio que tuvo una muestra de más de 12.000 biopsias de cáncer de pulmón, colon y melanoma.

La intención era describir la epidemiología molecular de varios tipos de cáncer en Colombia y así conocer cuál de ellos se da más en una zona que en otra. “Sirve para definir políticas de salud, pues se debe invertir más en ciertos municipios de acuerdo con el comportamiento de la enfermedad”, dice Carranza.

La manera de hacer investigación clínica en cáncer ha cambiado vertiginosamente. Y Ficmac ha ido de la mano de esos cambios. Antes, los oncólogos veían estas pruebas como un plus, pero hoy son una necesidad.

Las investigaciones en cáncer le han permitido a ficmac convertirse en un referente para la comunidad científica 12.000 biopsias de cáncer de pulmón, colon y melanoma realizó Ficmac en un estudio que le mereció el premio de Investigación Científica 2019.


EN CIFRAS IDEAS QUE TRANSFORMAN

El liderazgo que ha alcanzado esta compañía en temas de innovación obedece, en buena medida, a la adecuada estrategia de gestión del talento humano. Esto le ha permitido avanzar más rápido que otras empresas del sector


RESULTADOS GENERALES POR DIMENSIÓN

Ha logrado adoptar exitosamente los cambios tecnológicos que exige la investigación del cáncer. Esto le permite destacarse en temas como lectura del entorno y aporte social, pues ofrece a sus públicos objetivos opciones ágiles para la toma de decisiones en materia de tratamiento.

Su trabajo ha sido tan exitoso en el área científica, social y de entendimiento del entorno que este año se destaca en varias de las dimensiones analizadas por el ranking de las 25 empresas que más le aportan a Colombia.

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