En 1999 jugó su primer torneo en la división A. En 2002, tan solo tres años después, estuvo a una victoria de la copa. Un logro que no tiene precedentes.
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Al sureste colombiano, en la frontera con Ecuador, está Nariño, un departamento escondido entre montañas y volcanes. Es cuna de arte, cultura y tradiciones, pero también del deporte. Por eso, hace siete décadas nació en la capital del departamento el Deportivo Pasto, un equipo de fútbol que más adelante representaría a la región en competencias locales, nacionales e internacionales. En sus inicios se llamó ‘Oro Rojo’, pero más adelante cambió su nombre por uno más regional, que los hinchas sintieran más cercano.
Quien impulsó la creación del equipo fue Miguel Humberto López (Milachel), un periodista y dirigente que trabajó por impulsar al deporte en Nariño. Este hombre lideró, por ejemplo, las campañas para la construcción del antiguo 13 de Junio, un estadio de fútbol que fue rebautizado y que hoy en día se llama Libertad. Actualmente está siendo remodelado y tendrá capacidad para 18.000 espectadores. Allí es donde los ‘volcánicos’ juegan de local.
Aunque la chaza –o tenis pastuso– sigue siendo el deporte más popular de Nariño, el fútbol también hace vibrar los corazones de sus habitantes. La primera vez fue en 1998, cuando el cuadro ‘Volcánico’ se coronó campeón del torneo de ascenso. El equipo jugó su primer certamen en la División A en 1999, medio siglo después de su fundación.
En 2002 quedó subcampeón del torneo. Fue un hecho sin precedentes, y el historiador de fútbol Guillermo Ruiz Bonilla lo deja claro en su libro Historia del fútbol profesional colombiano. Entre páginas asegura que “con solo cuatro años en el profesionalismo, disputó la gran final, suceso sin ningún antecedente en el fútbol colombiano. Lo hizo de la mano de Néstor Otero, un hombre que supo armonizar la juventud con la experiencia para conformar un equipo sólido y contundente”. La final la jugó contra Independiente Medellín.
El mejor año para el equipo fue el 2006, cuando se coronó campeón de la A en el torneo de apertura y consiguió su pase para ser uno de los representantes de Colombia en la Copa Libertadores de 2007. Su rival fue el Deportivo Cali. En el partido de ida, que tuvo lugar en la capital vallecaucana, los ‘volcánicos’ ganaron 1-0. En el de vuelta, empataron 1-1.
A pesar de haber ganado un solo título, el Deportivo Pasto tiene varias razones para estar orgulloso: jugó tres subcampeonatos (2002-II, 2012-I y 2019-I), llegó a octavos de final en la Copa Sudamericana de 2013, estuvo presente en la Libertadores, entre otros; demostrando que Pasto y Nariño también son potencia en el deporte.
