CANDIDATOS / HOJA DE VIDA

Sergio Fajardo tiene pinta, actitud y métodos de profesor. Ejerció esa profesión durante años con pasión, en el campo de las matemáticas. Y como un maestro es tan distinto a un político, en la campaña presidencial de 2018 ha subrayado esos aspectos de su talante para tratar de convencer al electorado de que es independiente, distinto y alternativo. Para derrotar, según sus palabras, a los mismos con las mismas. Con un posicionamiento semejante fue fórmula de Antanas Mockus en 2010 -en la ola verde- y llegó a la Alcaldía de Medellín y a la Gobernación de Antioquia.

Aunque su carrera pública se inició tarde, ha sido consistente en su actitud crítica hacia la política tradicional y hacia las fuerzas que han dominado el panorama. Creó la Coalición Colombia con el Polo Democrático y el movimiento Compromiso Ciudadano, Claudia López y Jorge Robledo bajo el liderazgo de un trío que superó dificultades para acordar una compleja distribución del trabajo: Fajardo es el candidato presidencial, Claudia López la aspirante a la vicepresidencia, y Jorge Enrique Robledo la cabeza polista para el Senado. Para consolidar la independencia de su proyecto, rechazó la propuesta que le formularon, de forma insistente y desde diversos sectores, para hacer una alianza con Humberto de la Calle y con el Partido Liberal, mediante el mecanismo de la consulta interpartidista.

Fajardo considera que la polarización es nociva para la política y se ha apartado de la confrontación entre santistas y uribistas. No entrar en ese juego es, para él, parte del cambio que quiere liderar, pero en esos sectores lo han utilizado en su contra para caracterizarlo como tibio e indeciso.

Desde el punto de vista programático, la agenda fajardista está encabezada por la lucha contra la corrupción y el fomento a la educación. Con sus compañeros de causa –Jorge Enrique Fajardo y Claudia López- apoya la realización de una consulta popular sobre mecanismos para castigar y evitar la corrupción. Y la prioridad de su proyecto consiste en llevar al Gobierno nacional prácticas que implementó en la Alcaldía de Medellín y en la Gobernación de Antioquia en favor de la educación. En sus ideas, discurso y formas, Sergio Fajardo tiene las características de un “outsider”: un político que promete renovar las prácticas tradicionales del ejercicio político.