18 FOTO: JOAKIM HOLMBERG / ISTOCK ha logrado neutralizar casi por comple-to las emisiones de carbono. La ciudad de Växjö es considerada la ciudad más ‘verde’ de Europa, y aparte del sistema centralizado de calefacción, promueve la creación de jardines y la construcción de edificios de madera que, además, aho-rren energía. El transporte público funciona con biogás y energía renovable, y gran parte de los habitantes usan tan solo bicicletas para tras-ladarse. Augustenborg, por su parte, recibió el Premio Mun-dial de Hábitat de las Naciones Unidas por sus 10.000 techos ‘verdes’ que impiden las inun-daciones Aunque parezca mentira, Suecia importa 800.000 toneladas anuales al absorber y reciclar la lluvia, pero también ha implementado –junto con la ciudad de Umeå– un sistema de energía solar con decenas de paneles so-lares instalados en edificios tanto públi-cos como residenciales. Además de estos avances, también ha habido una tendencia en toda Suecia a continuar e incrementar la tradición de las huertas urbanas y a pre-servar las abejas en las zonas verdes de las ciudades, no solo porque sus números están disminuyendo alrededor del mundo, sino porque muchas de las plantas que consumimos dependen de la polinización. El suburbio de Huddinge, en Estocolmo, ha convertido el techo de un parqueadero en un enorme jardín con las condiciones necesarias para la repoblación de las mariposas en la zona. La más curiosa iniciativa de todas las que se están realizando en Suecia –y que parece sacada de una película de ciencia ficción– es la de las llamadas ‘casas pasivas’, cuya energía proviene de –óigase bien– el calor humano. Un sistema geotérmico instalado en la Esta-ción Central de Estocolmo, por ejemplo, cap-tura el calor de sus 250.000 usuarios y lo pasa por un regulador que calienta el agua sufi-ciente para alimentar el sistema de calefac-ción de... basura. del Kungsbrohuset, un enorme edificio del centro de la ciudad. Si eso no es milagroso, ¿qué lo es? De la bocina del teléfono al Skype, de la llave ‘inglesa’ al marcapa-sos, de la cerilla a la calefacción con energía corporal, de la cremallera a las ciudades sostenibles, Suecia ha revolucionado y sigue revolucio-nando la tecnología que hace nuestras vidas más fáciles y amables. Entonces, ¿por qué no acordarnos de ella de vez en cuando, al menos cuando encendemos un fósforo o tomamos el desayuno? SPOTIFY Esta aplicación ha logrado revolucionar la industria musical, al luchar en contra de la piratería y ofrecerle al suscriptor una gran biblioteca musical a bajo costo, al tiempo que ofrece a los artistas una remuneración por su trabajo. Los emprendedores suecos Daniel Ek y Martin Lorentzon son el cerebro de esta compañía, que nació en 2008. Gotemburgo usa un sistema centralizado de calefacción que recicla la energía de las plantas industriales. Calienta 90 por ciento de los edificios residenciales. Suecia
SUECIA
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