María Severa Riascos
Vereda El Alto, El Peñol, Nariño
“Yo tengo 70 años ya y el sueño en la vejez mía es que nuestros hijos y nietos sigan adelante con el estudio. Mi esposo murió hace tres años. Él era agricultor, le gustaba el plátano. En esa época no se cultivaba coca. Teníamos nuestras gallinitas, puerquitos, todo eso, pero vinieron las tristezas por el verano. Eso fue lo que nos mandó nuestro Señor. Entonces lo primero que nosotros necesitamos es un riego y poder seguir manteniéndonos con fríjol, maíz, caña y los animalitos: cuyes, chumbas y conejos”.