Cinco grandes retos
  • Agua

     

    Agua hay para todos, pero según datos de Unicef, 1.100 millones de personas viven sin este recurso para el consumo diario. De hecho, al año mueren más personas por enfermedades relacionadas con el agua contaminada que por las guerras o los desastres naturales, y de estos, muchos son niños.

     

    “En el África subsahariana las mujeres gastan 40.000 millones de horas al año recogiendo este líquido. El potencial humano perdido con esta crisis es incalculable”, señaló a SEMANA Paul Darilek, director de Living Water International.

     

    Según datos de Naciones Unidas, es probable que en 2050 una de cada cuatro personas viva en un país afectado por la escasez crónica o recurrente de agua apta para consumo y no pocos pronostican que algunas de las guerras del futuro serán por el control de este recurso. Por eso, es indispensable que los gobiernos ideen estrategias para garantizar la igualdad social del derecho al recurso hídrico y al saneamiento.

     

  • Ciudades sostenibles

     

    Según las Naciones Unidas, la mitad de la población mundial vive actualmente en urbes, pero en 2030 esa cifra subirá a 60 por ciento. Y está expansión será aún más drástica en los países en desarrollo. Ante esto, las ciudades deben aportar nuevas ideas para responder al reto del crecimiento urbano para seguir proveyendo el desarrollo social y económico a sus habitantes sin menoscabar el medio ambiente. Esto implica discutir hacia dónde deben crecer las megaurbes, pues si lo hacen en forma descontrolada puede resultar en altos costos para la infraestructura y transporte, y mayores emisiones de gases efecto invernadero. Además podría alterar las estructuras ecológicas y fomentaría la conversión de regiones rurales en urbanas, y todo esto es ambientalmente insostenible. También implica hablar de movilidad para que las áreas residenciales, los sitios de trabajo, las zonas de comercio y recreación estén al alcance de las personas.

  • Seguridad alimentaria

     

    Las personas deben tener acceso físico, social y económico a alimentos frescos y nutritivos para llevar una vida activa y sana. Pero esto, que se conoce como seguridad alimentaria, aún en muchas regiones del planeta es una fantasía. La agricultura, base de la seguridad alimentaria, debe transformarse para responder a los retos del crecimiento sostenible. “En Río+20 tenemos la oportunidad de oro para explorar la convergencia entre los programas de seguridad alimentaria y la sostenibilidad a fin de hacer realidad el futuro que queremos”, afirmó José Graziano da Silva, director general de la FAO.

  • Océanos

     

    Los mares y los océanos son esenciales para la vida en tierra firme: absorben más dióxido de carbono que los bosques tropicales, regulan el clima, proporcionan alimento a cientos de millones de personas, son fuente de principios médicos, sirven al transporte y al ocio.

     

    A pesar de su importancia, conservarlos es cada vez más difícil. El cambio climático, la contaminación, las embarcaciones, el uso de técnicas destructivas de pesca, la sobreexplotación del recurso marino, las especies invasoras y las construcciones costeras los tienen en jaque. Se espera que en Río+20 se movilice a Naciones Unidas, a los gobiernos y a otros socios para mejorar la conservación de los océanos.

  • Eficiencia energética

     

    Los mares y los océanos son esenciales para la vida en tierra firme: absorben más dióxido de carbono que los bosques tropicales, regulan el clima, proporcionan alimento a cientos de millones de personas, son fuente de principios médicos, sirven al transporte y al ocio.

     

    A pesar de su importancia, conservarlos es cada vez más difícil. El cambio climático, la contaminación, las embarcaciones, el uso de técnicas destructivas de pesca, la sobreexplotación del recurso marino, las especies invasoras y las construcciones costeras los tienen en jaque. Se espera que en Río+20 se movilice a Naciones Unidas, a los gobiernos y a otros socios para mejorar la conservación de los océanos.

En la cumbre de Río ciertas problemáticas recibirán una atención especial debido a que su manejo es crucial para garantizar la vida. Estas son cinco de ellas.